Reportaje de boda de Sandra y Samuel en San Sebastián
Sandra y Samuel han querido compartir con nosotros sus recuerdos de ese dia tan especial, el día de su boda en San Sebastián...
Empezamos el día sintiéndonos afortunados de poder compartir este día con nuestras familias, desde el momento de la preparación en la que había algunos nervios, hasta el momento en el que llegamos a la basílica, donde nos encontramos con el resto de amigos y familiares. Samuel se preparó junto con su familia frente a la Concha, y Sandra junto con su madre y su amiga Irene en el hotel Londres. Fueron momentos muy agradables y divertidos, aunque hasta la hora de salir hacia la iglesia la indecisión sobre si llovería o no era mucha, al final el tiempo respeto y salió un día precioso.
La llegada a la iglesia fue muy emocionante, al ser el primer fin de semana de septiembre, la ciudad estaba repleta de gente y la iglesia está situada en un lugar muy concurrido tanto por turistas, como por locales.
Durante la ceremonia, pudimos sentir el respeto y felicidad de nuestros invitados, y acompañados de un coro muy profesional y de la lectura de nuestros hermanos, nos sentimos muy arropados y agradecidos en todo momento.
Desde ese momento sentimos que todos nuestros invitados estaban muy ilusionados con el evento y lo que para nosotros suponía. La llegada a la torre fue soñada, tanto por la temperatura, como por el entorno, todo estaba precioso, la decoración cuidada al detalle, la música, el catering, etc...
El tiempo que duró el cóctel fue muy agradable, ya que pudimos compartir ese tiempo con las personas que ese día nos acompañaban, y saludar a aquellas personas con las que no habíamos podido estar en Santa María.
La entrada al comedor fue muy divertida, escogimos una canción de Chayanne que hizo saltar a todo el mundo. Tras esto, Samuel pronunció unas palabras de agradecimiento que emocionaron a casi todo el que estaba bajo aquella carpa.
La comida fue maravillosa, estuvo todo genial. Tras esto, durante el tiempo del postre, Samuel y el hermano de Sandra repartieron los puros; para pasar después al corte de tarta y entrega de ramos.
Tras ello, abrimos el baile junto con los padrinos, y a partir de este momento todo fue diversión. Un día inolvidable que se nos pasó como un suspiro.
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